Implicación fiscal del aumento de la cifra de negocio

La «cifra de negocios» comprende las ventas habituales de bienes y servicios (sin incluir el IVA y considerando en negativo las devoluciones de ventas, los rappels y los descuentos otorgados). No se incluyen, por tanto, las ventas de activos, las subvenciones para realizar inversiones ni los ingresos financieros.

Si este año su empresa aumenta su cifra de negocio, recuerde que, si supera determinados límites, sus obligaciones fiscales pueden sufrir cambios:

  • IAE. Si alcanza el millón de euros de facturación, su sociedad dejará de estar exenta del Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE).
  • Declaraciones mensuales e IVA. Si su volumen de operaciones supera los 6.010.121,04 euros, deberá presentar autoliquidaciones mensuales de retenciones y de IVA. Además, deberá cumplir con las obligaciones derivadas del sistema de Suministro Inmediato de Información (SII).
  • Impuesto sobre Sociedades. Si su cifra de negocios supera los 6 millones de euros, deberá efectuar los pagos fraccionados en función del sistema de bases (según la base imponible positiva acumulada).
  • Reducida dimensión. Y si alcanza los 10 millones de euros, a partir del siguiente ejercicio ya no se considerará empresa de reducida dimensión (pyme) en el IS. No obstante, en muchos casos podrá seguir aplicando durante 3 años más los incentivos fiscales de dicho régimen (siempre y cuando en el ejercicio en el que supere dicha cifra de negocios y en los dos anteriores haya cumplido los requisitos para ser pyme).

Operaciones de final de año. Si la facturación de su empresa en lo que va de año se acerca a alguna de estas cifras, plantéese demorar alguna venta para el ejercicio siguiente (siempre que ello sea posible). No basta con que retrase la emisión facturas hasta el mes de enero: es preciso que la fecha de devengo de estas operaciones –en general, en las entregas de bienes se trata de la fecha de puesta a disposición y en los servicios suele ser la fecha de prestación efectiva del servicio– se retrase hasta que se haya iniciado el próximo año. Por ejemplo, si un cliente le hace un pedido a finales de 2023, negocie la posibilidad de entregarle los bienes en enero de 2024.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *